Domarlo vs. deshacerse de él
- analiahcross
- 15 sept 2023
- 1 Min. de lectura
La salud mental es como tener un carro. Hay carros que
están construidos con una excelente calidad y tienen todos
los artilugios para funcionar de manera óptima. Es difícil que
causen graves problemas. Algunos, no obstante, son promedio:
pueden funcionar bien con el mantenimiento adecuado.
El resto viene con ciertos problemas desde que lo adquieres.
En general, con el carro, si no das el tiempo para cuidar de
él cuando está bien, te verás forzado a hacer el tiempo para
cuidarlo cuando ya no te funcione. Es lo mismo con nuestra
salud mental. No podemos predecir o evitar que nuestro carro
se le pinche un neumático, o se le rompa un cristal, o deje de
funcionar el aire acondicionado. Cuando estas cosas pasan,
¿qué hacemos? Cambiamos el carro o lo arreglamos. Nadie
piensa en cambiar el carro inmediatamente se le presenta el
primer inconveniente, ni el segundo, ni el tercero. Para eso tenemos
una «caja de herramientas» y un mecánico. Aprendemos
a arreglar el problema con herramientas que sabemos que
funcionan y siempre las tenemos a mano en la cajuela; o vamos a donde
alguien que sabe arreglar el problema. En la vida, no podemos
evitar que nos pasen cosas negativas, que afecten nuestra salud
mental. Tan solo tenemos una cosa: afrontarlas. Recurrimos
a nuestra «caja de herramientas» cada vez que vemos un
problema –externo o interno–, o vamos a donde un experto.
No eliminamos el carro, porque es valioso para nosotros. Así
mismo con nuestra vida. Es útil y necesaria, la domamos.
Conocemos nuestro carro como nadie más, nos movemos
con él hasta que realmente se detenga. Lo mismo con nuestro
cerebro.



Comentarios